El trading ofrece un regalo y una maldición. El regalo es que estamos en total control de lo que hacemos. La maldición es que no hay reglas o límites externos que guíen o estructuren ese comportamiento. Debemos actuar con autocontrol si queremos crear una medida de éxito constante.
PROBLEMAS:
a) La Voluntad de No Querer Crear Reglas: Esta resistencia es debida a que la mayoría de
nuestras estructuras mentales provienen de elecciones hechas por otras
personas, mientras se nos negaban
nuestros impulsos naturales, que siguen existiendo dentro de nosotros como
frustración, enojo, desilusión, culpa u odio.
La acumulación de estos sentimientos nos obliga a resistirnos ante
cualquier cosa que nos robe la libertad.
b) El Hecho de No Asumir la Responsabilidad: Si deseas ser consistente tienes que aceptar la responsabilidad por los resultados. Para evitar la responsabilidad adoptamos un estilo de trading que es un juego de azar. Y eso no es así. A pesar de que los resultados de cada patrón son aleatorios, el resultado de una seria de pautas es consistente. Es una paradoja que se resuelve siendo disciplinados.
c) La Adicción a las Recompensas Aleatorias (al Azar): Es muy problemática para los traders porque es otra fuente de resistencia a crear el tipo de estructura mental que produzca consistencia.
d). Control Externo VS Control Interno: Estamos preparados para funcionar en un “entorno social”. El mercado lo parece pero no lo es. Aquí cada cual se ocupa de sí mismo. Es un entorno que nos ignora y que no responde a lo que es importante para nosotros.
Mucha gente exitosa en otros ámbitos lo es por su capacidad para “manipular y controlar su ambiente social”, para que éste responda como él desea. Ninguna de estas técnicas funciona frente a los mercados. Aquí debemos aprender a controlarnos a nosotros mismos, para que siempre nos comportemos de manera mejor para nuestros intereses.
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